Somos una familia tradicionalmente campesina que de toda la vida se dedica a cultivar y cuidar el huerto y sus campos. Tenemos campos de naranjos, clementina, olivos, almendros y algarrobos, todo cultivos autóctonos de la comarca del Montsià: incluida en la Reserva de la Biosfera de Tierras del Ebro.
Compaginando los cultivos siempre ha habido un huerto donde sembrar y cultivar según la temporada frutas y verduras para consumo familiar. Nuestras abuelas y las abuelas de nuestras madres, y así podríamos seguir sin parar, siempre han aprovechado los excedentes del huerto para hacer unas buenas confituras y conservas.
A la hora de comercializar los productos de los campos, nos encontramos con una parte de nuestra fruta no es comercializable ya que no se adapta a los estereotipos marcados por la sociedad de consumo (calibre, tacto, vista). En nuestra casa el desperdicio de alimentos no existe, todo es aprovechable.